Khaled Hosseini: Cometas en el Cielo y Mil soles esplendidos

El autor:

Jaled Hosseini es un médico y novelista afgano-estadounidense nacido en la capital de Afganistán, Kabul, el 4 de marzo de 1965.
Publicó la novela " Cometas en el cielo", en el 2006. Su segunda novela, "A Thousand Splendid Suns" ("Mil soles espléndidos") fue publicada en 2007.
Su padre fue diplomático del Ministerio de Asuntos Exteriores de Afganistán y su madre enseñaba Farsi e Historia en un gran instituto en Kabul. En 1976, El Ministerio de Asuntos Exteriores envió a la familia a París. En 1980 estaban preparados para volver a Kabul pero para entonces Afganistán había sufrido la invasión soviética. Los Hosseini recibieron asilo político de Estados Unidos. Hosseini acabó los estudios secundarios en 1984 e ingresó en la Universidad de Santa Clara, donde se graduó en Biología en 1988. Mientras hacía prácticas, empezó a escribir su primera novela, Cometas en el cielo, que se publicó en 2003. En 2006 fue nombrado embajador de buena voluntad del ACNUR (UNHCR en sus siglas en inglés), Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados.



La primera novela que leí de este escritor-medico fue Cometas en el Cielo, una novela preciosa, de esas que según empiezas se te encoge el corazón y no se relaja hasta que no la terminas. Cometas en el cielo cuenta la historia de un niño afgano, y sus vicisitudes por la vida, en medio de la guerra. De cómo el niño se convierte en hombre, pero sus demonios de juventud le siguen atormentando. Y llevado por esa conciencia persistente, vuelve a su país, Afganistán. Vuelve a su tierra, para rescatar su tranquilidad, para reencontrarse con su pasado. Y a través de esas vivencias, nos presenta un mundo duro, a la par que nostálgico, un mundo lleno de violencia e incomprensión pero también de amor y amistad. Es en resumen, una gran novela que nos acerca a un mundo lejano pero muy presente en el panorama actual.



La siguiente novela escrita por el autor, y leída por mi es Mil Soles Esplendidos, escrita en el 2007. Este libro es de esos que te hacen pensar, e incluso te arrastran a tantos sentimientos, que a veces he dudado si me estaba gustando o no. La novela cuenta la historia de dos mujeres, y como sus vidas se entrecruzan. Dice el autor que se basó en sus vivencias como cooperante de ACNUR, y de todo aquello, que tanto su padre como su madre le fueron contando. Por un lado es la historia de Mariam, hija ilegítima de un gran hombre de negocios, que ve como su vida se va transformando, cada vez a peor, y obligada constantemente por las absurdas y obsoletas tradiciones de su país, y sobre todo de los gobiernos de este. Por otro lado, está la historia de Laila, que parece un pájaro a punto de desplegar las alas, pero que una guerra trastoca su vida drásticamente, para luego ser encauzada, pero ya con muchas taras a su espalada. A través de la historia de estas dos mujeres no solo conoceremos el panorama del país frente a la invasión soviética, y los anhelos de sus habitantes sino que también veremos como la subida de los Talibanes destroza cualquier avance social, y como finalmente la entrada de EEUU abre las ventanas y airea los espacios.
Pero esta novela además nos narra las injusticias, no solo del gobierno hacia sus habitantes, sometiéndoles a un yugo infernal. Sino también del hombre hacia la mujer, la incomprensión del ser humano, llega en este libro a cotas altísimas, haciéndonos ver lo inhumano que pueden llegar a ser las personas, las unas con las otras, en este caso, las mujeres se verán malparadas hasta aspectos inimaginables para una mente cuerda. Así durante el libro he llorado, pero sobre todo he sentido impotencia, rabia, e incluso mis más ocultos instintos asesinos han aflorado.

Como detalle os dejo una de las hojas de este libro, donde quedan plasmadas las reglas impuestas por los Talibanes hacia un pueblo al que solo querían matar.

Nuestro watan se conocerá a partir de ahora como Emirato Islámico de
Afganistán. Éstas son las leyes que nosotros aplicaremos y vosotros
obedeceréis:

Todos los ciudadanos deben rezar cinco veces al día. Si os
encuentran haciendo otra cosa a la hora de rezar, seréis azotados.
Todos los hombres se dejarán crecer la barba. La longitud correcta
es de al menos un puño por debajo del mentón. Quien no lo acate, será
azotado.

Todos los niños llevarán turbante. Los niños de uno a seis años
llevarán turbantes negros, los mayores lo llevarán blanco. Todos los
niños deberán vestir ropa islámica. El cuello de la camisa se llevará
abotonado.

Se prohíbe cantar.
Se prohíbe bailar.
Se prohíben los juegos de naipes, el ajedrez, los juegos de azar y las
cometas.
Se prohíbe escribir libros, ver películas y pintar cuadros.

Si tenéis periquitos, seréis azotados. A los pájaros se les dará
muerte.

Si robáis, se os cortará la mano por la muñeca. Si volvéis a robar, se
os cortará un pie.

Si no sois musulmanes, no podéis practicar vuestra religión donde
puedan veros los musulmanes. Si lo hacéis, seréis azotados y
encarcelados. Si os descubren tratando de convertir a un musulmán a
vuestra fe, seréis ejecutados.

Atención, mujeres:

Permaneceréis en vuestras casas. No es decente que las mujeres
vaguen por las calles. Si salís, deberéis ir acompañadas de un mahram,
un pariente masculino. Si os descubren solas en la calle, seréis azotadas
y enviadas a casa.
No mostraréis el rostro bajo ninguna circunstancia. Iréis cubiertas
con el burka cuando salgáis a la calle. Si no lo hacéis, seréis azotadas.

Se prohíben los cosméticos.
Se prohíben las joyas.
No llevaréis ropa seductora.
No hablaréis a menos que os dirijan la palabra.
No miraréis a los hombres a los ojos.
No reiréis en público. Si lo hacéis, seréis azotadas.
No os pintaréis las uñas. Si lo hacéis, se os cortará un dedo.

Se prohíbe a las niñas asistir a la escuela. Todas las escuelas para
niñas quedan clausuradas.

Se prohíbe trabajar a las mujeres.

Si os hallan culpables de adulterio, seréis lapidadas.

Escuchad. Escuchad atentamente. Obedeced.
Alá-u-akbar.